Fiel a su dueño fallecido, “Payaso” no se despega de su cruz

En el Día Mundial del Perro, conoce la historia de fidelidad de "Payaso", un lomito que sigue esperando a su dueño quien murió atropellado
En el Día Mundial del Perro, conoce la historia de fidelidad de "Payaso", un lomito que sigue esperando a su dueño quien murió atropellado

Agencia MVT / Claudia Lucía Unna

TOLUCA, México, 21 de Julio de 2022.- En el lugar en el que murió José Alfredo, mejor conocido como “El Siris”, espera “Payaso”, el perro que lo acompañó hasta el día en que murió atropellado sobre la calle Sor Juana Inés de la Cruz, en el centro del municipio de Toluca.

En el lugar apenas queda una cruz que colocaron en memoria de “El Siris”, y ahí el peludo pasa las horas en espera de su dueño; si tiene hambre o llueve, se va a una veterinaria ubicada a dos cuadras donde lo cuidan.

Hay más de 100 mil perros callejeros en Toluca

“Payaso” es uno de los más de 100 mil perros callejeros que existen en la capital mexiquense, aunque es de los conocidos como semidomiciliados; es decir, que deambulan por las calles pero tienen nombre y alguien los alimenta.

El perrito pasa los días en la colonia Zopilocalco, caminando por donde solía hacerlo con José Alfredo, quien fue atropellado por un autobús urbano en agosto del año pasado, en el cruce de Sor Juana y Santos Degollado.

Ese día “Payaso” intentó seguir el cuerpo de su dueño y regresó a los pocos días al último lugar donde percibió su aroma.

Tranquilo, el peludo camina por calles que conoce -y marca para no perderse- con singular tranquilidad, pues no se inmuta ante la presencia de humanos, perros ni vehículos, pasa los días en las calles de Sor Juana, Santos Degollado, Gómez Pedraza y Pino Suárez.

“Sí, sí lo sigue esperando, sí le batalló el perrito”, comentó don Abel, dueño de una taquería donde “Payaso” llega en busca de unas sobras para alimentarse todos los días.

Si la noche cae o llueve, “Payaso” se encamina a la veterinaria donde le dan asilo, aunque muy temprano regresa a las calles, a la cruz donde la esencia de su compañero lo protege de las jaurías, de los automovilistas y los camiones que pasan por Santos Degollado sin reparar en el semáforo que parpadea en rojo para indicar un cruce, así como de quien quiera llevárselo.

Sus bigotes blancos, la mirada triste y su andar pausado son testigos de lealtad de “Payaso” para “El Siris”, por ello lo espera, especulan quienes lo cuidan, para poder descansar.

Sobre el Autor José Contreras

Miercoles 24 de Abril del 2024 1:55 am