TOLUCA, México, 24 de Dic.- La caída de las remesas provenientes de los Estados Unidos disminuirá el nivel del consumo familiar, perjudicando a su vez las condiciones económicas y sociales de México, sostuvieron los investigadores Lidia Carvajal y Leobardo de Jesús Almonte. \rExplicaron que las remesas representan la segunda fuente de ingresos externos a la nación, sólo por debajo de los generados por el petróleo y que constituyen el dos por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), así como el 40 y hasta el 90 por ciento de los ingresos familiares de más de 12 millones de migrantes mexicanos. \rIndicaron que como consecuencia de la crisis financiera mundial, desde el 2008 el desequilibrio económico de Estados Unidos ha repercutido de manera sustancial en nuestro país, prueba de ello es la cantidad de remesas alcanzada en dicho año, donde se obtuvieron únicamente 25 mil millones de pesos, cantidad inferior a los 26 mil millones logrados en el 2005.\r“Las recursos económicos que mandan los migrantes mexicanos a sus familiares han disminuido, tan solo para el segundo trimestre del 2007 se tuvo una caída de cuatro por ciento y para 2008 su tasa de crecimiento, respecto al mismo trimestre del año anterior, registra un número negativo en forma consecutiva, siendo la más alarmante de 8 por ciento para el tercer trimestre”, expresaron. \rFinalmente, puntualizaron que actualmente los controles oficiales migratorios son más estrictos, por lo cual resulta más difícil que los migrantes encuentren alguna opción de empleo, perjudicando esta acción el envío de remesas a nuestro país.\r