TENANCINGO, México, 3 de Enero.-El turismo de golf en México genera destinos turísticos que abren nuevos nichos de mercado y oportunidades de comercialización turística.\r\nAdriana Flores Regules y Elva Esther Vargas Martínez, investigadoras de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) explicaron que el golf representa una importante derrama económica, aunque la oferta no tiene un esquema ordenado y más bien se distribuye por características climáticas, territoriales y la excelencia de las instalaciones y servicios que ofrecen los destinos turísticos.\r\nDetallaron que los campos de golf presentan problemáticas que tienen que ver con la modificación del paisaje, la transformación ecológica, los patrones de construcción, el suministro de agua y apropiación de grandes extensiones de tierra.\r\nTodos los estados de la República, a excepción de Tlaxcala, cuentan con proyectos de inversión para ser desarrollados, además de los 168 campos que ya operan en México, de los cuales, 34 por ciento se ubican en zonas de sol y playa.\r\nExplicaron que es necesario tomar en cuenta los cambios del uso de la tierra y movimientos en el terreno, que pueden alterar hábitats de la fauna silvestre, humedales, corrientes y estanques; también en el uso de fertilizantes químicos y pesticidas, que pueden contaminar la tierra, el agua ?superficial y subterránea-, así como dañar a plantas y animales autóctonos, aunado al alto consumo de agua que implica su mantenimiento.\r\nApuntaron que las organizaciones responsables de la gestión de los campos de golf deben adquirir una conciencia de responsabilidad ambiental, para alcanzar mejores resultados, que engloben la parte jurídica, la conservación del campo y de su propio entorno.