Agencia MVT/ Angélica Ramírez
TOLUCA, México, 6 de Abril del 2017.- A través de las políticas de industrialización que se han implementado en el Valle de Toluca, se han instalado en esta ciudad, Lerma y Ocoyoacac más de 2 mil 500 industrias que trabajan los 365 días del año y las 24 horas del día, lo que genera un grave problema ambiental que se refleja en los cambios bruscos de temperatura, mala calidad del aire, contaminación de ríos, basureros al aire libre y enfermedades, enfatizó Luz María Gómez Ordóñez, presidenta del Movimiento Ecologista del Estado de México.
La activista y académica universitaria detalló que el Valle de Toluca tiene una superficie de 700 kilómetros cuadrados, limitados por el Nevado de Toluca, el Cerro de Jocotitlán, el Parque Sierra Morelos, las elevaciones de Tenango del Valle y de Valle de Bravo, situando a Toluca como punto propenso de contaminación.
“Estas fábricas se encuentran descargando aguas residuales tóxicas, gases contaminantes que han generado graves cambios en zonas como la Cuenca del Río Lerma”, apuntó.
Explicó que el Movimiento Ecologista del Estado de México impulsa políticas de conservación ambiental, por lo que han realizado estudios científicos que les permiten conocer las condiciones en las que actualmente se están viviendo en el Valle de Toluca.
Manifestó que las industrias han cambiado de manera trascendental la forma de vida de la personas, ya que el crecimiento de la mancha urbana se ha ido expandiendo, generando la extinción de espacios verdes, escasez alarmante de agua y la contaminación de aguas residuales, concentración de aire contaminado y expansión de partículas suspendidas, siendo las principales problemáticas que tienen a Toluca en serios problemas ambientales.
“Las partículas suspendidas concentradas se han convertido en un grave problema de salud, afectando en su gran mayoría a niños y adultos mayores con enfermedades en vías respiratorias, cardiacas y dermatológicas”.
Enfatizó que las autoridades estatales y federales tienen la responsabilidad de aterrizar políticas de conservación ambiental de emergencia, con el fin de dar soluciones y resultados para las siguientes generaciones, por lo que reconoció que como organización civil con más de 20 años de haberse conformado se han enfilado junto con especialistas, académicos y sociedad para promover e implementar iniciativas y actividades que devuelvan al entorno la calidad que poseen.
Afirmó que en la entidad existe un Código de Biodiversidad donde hay un apartado que tiene leyes que procuran el ambiente; sin embargo, no se implementan en la sociedad. “Existe la ley, pero lamentablemente no se llevan a la implementación”, dijo.
Lo que necesitamos es que las autoridades se enfoquen e investiguen en lo que verdaderamente ocupa, en implementar programas, monitorear y coordinar estrategias para verdaderamente dar uso a las plantas tratadoras de aguas residuales que se encuentran en Toluca, sancionar a las empresas que no cumplen con las normativas y generar un ambiente sano para todos, concluyó.
