Agencia MVT
Toluca, México, 24 de enero de 2019.- Un desarrollo inmobiliario cuya construcción fue impulsada días antes de que terminara la gestión del gobernador Eruviel Ávila Villegas pone en riesgo más de 200 hectáreas de bosques de encino en el Estado de México, además de la tala de aproximadamente 200 mil árboles de 13 especies distintas, generando un grave peligro ecológico.
De acuerdo con un reportaje publicado este jueves por el portal Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, los permisos para intervenir el área natural protegida, fueron concedidos en fast track en beneficio de empresarios ligados a las cúpulas del PRI y del Grupo Atlacomulco en el último mes de gestión de Ávila Villegas, ahora senador por el PRI.
El volumen de árboles que hay en la zona es casi el equivalente a los ejemplares que hay en todo el bosque de Chapultepec en la Ciudad de México. Según la investigación, el gobierno federal cobró poco menos de 22 millones de pesos por un estudio de impacto ambiental para el desarrollo denominado «Bosque Diamante», valuado en más de diez mil millones de pesos, con lo que se construirán cerca de 20 mil viviendas; seis veces más de las que hay actualmente en ese municipio mexiquense.
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