Agencia MVT/ Guillermo Guadarrama
Toluca, México, 18 de agosto de 2018.- Rafael Águila Sánchez es sinónimo de heroismo, tras 45 años de servicio y sacrificio para la Cruz Roja mexiquense.
Mejor conocido como Comandante Águila, el mando de la Delegación Cuautitlán de Cruz Roja asegura que si volviera a nacer, formaría nuevamente parte de esta institución que le ha dejado grandes enseñanzas a nivel profesional y personal.
La vocación la trae en la sangre, pues es la tercera de cuatro generaciones de la familia Águila que ha vivido para ser parte de este equipo de rescate, arriesgando su vida por el bien de sus semejantes. No hay mayor satisfacción que el servir a la sociedad, según explica.
Fue por eso que esta semana, la Cruz Roja Mexicana brindó homenaje al Comandante, hoy delegado de la Cruz Roja en el municipio de Cuautitlán, otorgándole una medalla de reconocimiento por más de 45 años de servicio.
No es la primera vez que es reconocido por su actividad heroica de rescate, pero descarta que sus actos se realicen por mero reconocimiento y enaltece su actitud altruista, pese a no tener una pierna.
Águila Sánchez hizo el llamado a la juventud de todo el país a unirse a este cuerpo de rescate, pues aseguró que no hay mayor satisfacción que ver los rostros de alivio de las personas que en algún momento se encontraron en peligro, como lo experimentó como voluntario en el terremoto de 1985.
“Cuando porten un uniforme de la Cruz Roja, lo porten con mucho orgullo y con mucho respeto porque eso es lo que te hace salir adelante”, expresó el mando.
Entre el sin fin de experiencias que tiene en su haber, existen también los malos recuerdos, cuando por más que los voluntarios se esfuercen, hay vidas que se pierden “y ya no hay nada más que hacer”.
“Ya lo comentaba anteriormente, una ocasión en un accidente vehicular donde iba una familia, los padres y su hijo, desafortunadamente los padres perdieron la vida pero al niño sí lo pudimos salvar y llevar al hospital para que fuera estabilizado”, recordó.
Los años de experiencia le han dado la oportunidad de ver el constante cambio que la Cruz Roja ha tenido derivado de la evolución y la llegada de las nuevas tecnologías, desafortunadamente -lamentó- que sea la negligencia de la sociedad la única que no cambia a través de las generaciones.