TOLUCA, México, 19 de Enero de 2011.- A pesar de que la Ley General para el Control del Tabaco (LGCT) tiene poco más de dos años de haber entrado en vigor en México, no protege totalmente la salud de las personas e incumple el convenio para el Control del Tabaco, mismo que en su artículo 8 establece la prohibición de fumar en lugares de trabajo interiores, medios de transporte público y lugares públicos cerrados. \r\nLivia Olvera Znyder, coordinadora de la organización civil Comunicación, Dialogo y Conciencia (CODICE) Estado de México, agregó que esta ley permite áreas exclusivas para fumar en lugares públicos cerrados, siempre y cuando sean espacios interiores aislados que dispongan de mecanismos que eviten el traslado de partículas hacia los espacios 100 por ciento libres de humo de tabaco y que no sea paso obligado para los no fumadores. \r\nSin embargo, aseveró que se ha demostrado que ningún nivel de exposición al humo de tabaco es seguro, además de que son ineficaces las soluciones que han propuesto, como la ventilación, filtración de aire y el uso de zonas destinadas a los fumadores. \r\nIndicó que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), los lugares donde se tiene permitido fumar están sujetos a niveles significativos de toxinas, pues algunos estudios han demostrado que los niveles de contaminación en espacios cerrados son superiores a los de la contaminación ambiental generada por vehículos automotores en calles o carreteras muy transitadas. \r\nAfirmó que se ha comprobado que el humo de tabaco de segunda mano puede expandirse de una habitación a otra, aunque haya puertas de por medio, además de que la contaminación causada por los químicos tóxicos de este humo persiste semanas e inclusive meses después de que se fumó. \r\nEs más, dijo, se impregna en paredes, alfombras, cortinas, ropa, comida, muebles y otros materiales, aún cuando las ventanas estén abiertas o se utilicen filtros de aire, ya que estos últimos, no pueden reducir la exposición al humo de tabaco en ambientes cerrados a niveles que se consideren aceptables.