Pirotecnia mexiquense: primer lugar nacional en producción

Agencia MVT / Ingrid Ahumada Mañon / Primera de cuatro partes

Tultepec, México, 9 de Diciembre de 2018.- Con 584 permisos en 62 municipios, entre productores y comercializadores, la pirotecnia en el Estado de México se afianza como punta de lanza en esta actividad, siendo los municipios con más permisos Tultepec con 145; Almoloya de Juárez con 86 y Zumpango con 79.

Para darse una idea, en el municipio mexiquense de Tultepec por ejemplo, cerca de 90 por ciento de los 110 mil habitantes del municipio Tultepec se dedica a la pirotecnia.

 

Aunque de 2017 a la fecha se tienen contabilizados 55 explosiones por productos pirotécnicos en el Estado de México, los controles son estrictos para poder montar un polvorín y mantenerlo funcionando.

Al respecto, Derek Cancino Aguilar, titular del Instituto Mexiquense de la Pirotecnia precisa que existen algunas medidas de seguridad básicas que exige SEDENA tanto a comercializadores como a productores, en ella se establece tener en las inmediaciones: extintores, tambos de agua, tambos de arena, pararrayos, barra de descarga antiestática, pala, pico, hacha, entre otras.

A 15 años de su creación, el IMEPI nunca había tenido un recurso para apoyar directamente al sector, por ello destacó que el gobierno mexiquense otorgó el pasado 5 de diciembre, 61 apoyos económicos a artesanos mexiquenses por más de 4 millones de pesos, para que el pirotécnico pueda solicitar las medidas de seguridad que exige SEDENA.

Cabe destacar que a nivel nacional el Estado de México ocupa el primer lugar en producción pirotécnica ya que el 50 por ciento de los permisos que otorga la SEDENA a nivel nacional se encuentran en el Estado y más del 60 por ciento de la actividad pirotécnica nacional sale de aquí.

Y aunque los artesanos mexiquenses pudieran tener el camino difícil por pirotecnia asiática, según cifras del IMEPI, en el 2017 China cerró al menos el 50 por ciento de sus fábricas al ya no ser un negocio rentable para su país, lo que ha generado un desabasto a nivel internacional y a la vez es un área de oportunidad para que México se posicione y pueda comercializar pirotecnia a otros países, siendo los más importantes en esta materia precisamente China, además de Brasil.

Tramitología del artesano

El tramitar un permiso para un taller, también conocido como “polvorín”, no es fácil. El proceso burocrático contempla los siguientes pasos:

1) Trámite de la autoridad local: se solicita en seguridad de Protección Civil municipal, además de un trámite de conformidad emitido por el Ayuntamiento del municipio para dar constancia que no hay inconveniente de que en la zona solicitada se establezca un polvorín.

2) Trámite con gobierno del Estado: Protección Civil estatal elabora un dictamen técnico de seguridad, después el IMEPI realiza una inspección y levanta un acta que entrega al secretario general de gobierno del Estado, quién emite la opinión favorable.

3) Último paso con SEDENA: todas las recomendaciones emitidas se presentan ante la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), que otorga o no el permiso requerido.

“Los centros de distribución de pirotecnia más conocidos son San Pablito en donde laboran alrededor de 300 comerciantes, Jaltenco, Bicentenario en Zumpango y uno más en Chimalhuacán”, añade Cancino Aguilar al tiempo que comenta que es mejor acudir a comprar a dichos centros que a los polvorines donde elaboran la pirotecnia.

«Un padre de familia le es más fácil venir aquí al mercado y encontrar la gran diversidad de productos a que como ahorita San Pablito está cerrado tienen que ir a la zona de los polvorines, pero no son todólogos, es decir a lo mejor Ricardo hace ratoncitos y yo hago ollitas y así a lo mejor hay que ir de polvorín en polvorín», precisó.

Isabel Ramírez es locataria en el centro de distribución de San Andrés Jaltenco y en su experiencia asegura que además de las medidas de seguridad que la SEDENA exige, ellos mantienen limpia la zona de trabajo, vigilan que los compradores no entren fumando ni con bebidas alcohólicas y no cuentan con luz eléctrica dentro de los locales. Como todo el producto lo comercializan en cajas o bolsas casi no lo manipulan.

En medio de la época decembrina que es una de las etapas de mayores ventas en el año detalla que los artefactos de mayor venta son los conocidos como cebollitas, ollitas, buscapiés, cohete blanco, palomas, chisperos de luz y las bengalas que se utilizan por lo general en las posadas.

 

Cabe destacar que el resto del año, la venta es mínimo, así que ella prefiere cerrar el negocio y dedicarse a la venta de cosméticos.

“Aquí fuera de esas fechas es muy difícil que se venda bien, lo que se vende es poco y muchos de nosotros cerramos y nomás abrimos las fechas fuertes, pero también hay lo que sí se quedan y abren todo el año”, dice.

Las medidas de seguridad son visibles en muchos polvorines, como el “Aduana” que se ubica en el municipio de Tultepec y en el que su propietario Rubén Aduana mostró a Agencia MVT los estándares de seguridad que acatar según las solicitudes de la SEDENA.

Su polvorín cuenta con cinco módulos, una caseta de vigilancia, un taller de elaboración, uno más para materias primas, otro más para el producto terminado y un módulo para el barril, lugar donde se hace la molienda de la pólvora con carbón y azufre. Pese a estas estrictas medidas, no ha quedado exento de que en 40 años de labor han ocurrido tres accidentes en su polvorín, todas con solamente daños materiales.

«Estás instalaciones me han costado 11 años de trabajo y de vida, no tengo otro negocio, este es mi sustento y hoy cuento con entre 15 y 20 trabajadores quienes también viven de esto», dice con orgullo.

En este polvorín elabora en promedio hasta 800 cohetes diarios bien trabajados y listos para su uso.

Viernes 19 de Abril del 2024 3:53 pm