TOLUCA, México, 1 de Oct.- Hasta la tarde de este jueves, los juzgados orales instalados en Almoloya de Juárez, Lerma, Tenango del Valle, Tenancingo y Teotihuacan, no habían celebrado audiencias para iniciar con el proceso sobre presuntos individuos acusados por delitos graves o sin agravante.\rLos juicios verbales públicos podrán desarrollarse a inicios de la semana entrante, pues en el transcurso de estos días, una vez que la policía judicial haga detenciones y puestas a disposición del Ministerio Público, los señalados tienen derecho a 72 horas de término constitucional, el cual incluso se puede ampliar.\rEs decir que, aún cuando una detención se hubiera hecho en el primer minuto de la noche de este jueves, momento en que entró en vigor la oralidad, no se hubiera podido desarrollar la audiencia este jueves, pues antes, un impartidor de justicia tuvo que iniciar la averiguación previa e investigar si lo señalado por las partes involucradas entra o no en el catálogo de delitos.\rA partir de ahí, determinar si el detenido se pone a disposición de un Juez para enfrentar su cargo en libertad o en prisión bajo la nueva modalidad verbal, sistema con el que un asunto se podría dictar el auto de vinculación a proceso, lo que antes se le conocía como auto de formal prisión, hasta llegar a una sentencia condenatoria o absolutoria en tres meses promedio.\rAntes, un asunto penal se desarrollaba al menos en un año, desde que las partes rendían sus declaraciones, ofrecían y desahogaban pruebas. \rLos juzgados orales están a la espera de recibir al primer inculpado que haya sido sorprendido en flagrancia, cometiendo una falta grave o sin agravante, solo así pasaría directo a una audiencia verbal.\r