Agencia MVT
Revelan los registros históricos que los primeros 81 arcos fueron inaugurados en noviembre de 1836 y que a través de los años se han convertido en referente de la capital para propios y visitantes, cuya arquitectura colonial aloja una parte importante de la actividad comercial y es punto de encuentro para la convivencia familiar.
Los 152 arcos que se contabilizan en la actualidad fueron construidos en diferentes etapas y están ligados tanto a la historia como al legado de importantes personajes que transformaron la capital.
Fue Manuel Izaguirre, entonces miembro del Ayuntamiento, quien solicitó al Templo de la Santa Veracruz la donación de 40 varas al este y al sur a fin de ampliar la construcción de los Portales, con el objetivo de que la ciudad luciera más hermosa. En contraparte, el gobierno local abonaría la cantidad de 100 pesos para el templo, propuesta que fue rechazada.
Casi cuatro décadas después, en 1917, durante la gubernatura de Agustín Millán Vivero, los últimos arcos fueron levantados por el entonces presidente municipal Eduardo González y Pichardo.
No fue hasta 1975 cuando las autoridades acondicionaron la Plaza Fray Andrés de Castro, lo que dio paso a la construcción de los 33 portales interiores.