Lerma, Méx., 12 de septiembre de 2007.- El río Lerma se encuentra a su máxima capacidad, y como se mantienen cerradas las compuertas de la Presa Alzate, el agua incluso ha comenzado a regresarse y a correr de norte a sur, lo que prevé el inminente desbordamiento de este cauce.\r\nDesde las primeras horas de este miércoles, cuadrillas de trabajadores de los municipios de San Mateo Atenco, Lerma y Ocoyoacac trabajan a toda prisa para elevar el borde oriente del cauce del río Lerma, pues las aguas han comenzado a derramarse, principalmente sobre tierras de cultivo y algunas viviendas de la zona rural.\r\nAl mediodía de este miércoles se habían colocado más de 5 mil costales con arena sobre el borde del río, para tratar de frenar la fuerza del agua.\r\nSin embargo, se advirtió que mientras la Comisión Nacional del Agua no abra las compuertas de la Presa Alzate para “desfogar” el río Lerma, este problema no se controlará y seguirán en riesgo más de 5 mil personas que viven en las márgenes de este cauce.\r\nEquipos de la Comisión del Agua del Estado de México, con motobombas y equipos tipo vactor han sido desplegados en puntos críticos del río Lerma, en un operativo que coordina la Dirección General de Protección Civil.\r\n\r\n