TOLUCA, México, 15 de Abril.- Cinco de los 8 aspirantes a la candidatura a la presidencia municipal de Villa de Allende que se registraron en el proceso interno del tricolor manifestaron su rechazo al dictamen de la Comisión Estatal de Procesos Internos (CEPI).\r\nAfirmaron, por medio de un comunicado, que las personas que recibieron el dictamen de procedencia no cuentan con el arraigo al interior de la militancia, de la estructura priista ni de la población, y se pone en riesgo el triunfo en las elecciones del 1 de julio.\r\nAl final del término establecido para recibir las solicitudes de aspirantes a la alcaldía de este municipio fueron 10 los registrados: Nicolás Gómora Maldonado, Porfirio Tapia Villegas, Aidé Elvira Álvarez Álvarez, H. Tomás Reyes Agapito, Ernesto Piño Martínez, José Flores Morón, Ricardo Reyes Colín, León Vilchis Martínez, Maximino Locadio y Maribel Arreola Ceballos.\r\nEl pasado sábado 14, el delegado del CDE del PRI en el municipio, Omar Reyes Abundio, colocó en estrados del propio Comité Municipal el dictamen (que tenía fecha del viernes 13), en el que solamente se consideraron como procedentes los registros de Nicolás Gómora Maldonado y Porfirio Tapia Villegas, quienes, de acuerdo a los inconformes, al momento del registro no cumplían con los 17 requisitos establecidos en la convocatoria respectiva.\r\nPor lo anterior, aseguraron que este lunes, a primera hora, estarán entregando ante los órganos internos del PRI estatal, del Tribunal Electoral del Estado de México y del Tribunal Federal Electoral, la petición de resarcir el proceso hasta que se dé a conocer el fundamento legal por el que fueron improcedentes los registros que rechazaron.\r\nLos inconformes advirtieron que en este municipio el PRI corre el riesgo de perder si se empecina en mandar como su abanderado a cualquiera de los que sí fueron aprobados, pues no cuentan con el arraigo entre la población, y más cuando Gómora Maldonado, que ya fue Síndico en el ayuntamiento que encabezó la perdedora a diputada local Lilia Díaz Sánchez, tiene serios problemas legales.\r\nAseguraron que Nicolás Gómora enfrenta una demanda ante la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), por parte de la población de San Isidro, ya que bajo el pretexto de haber comprado unos terrenos que eran propiedad de una familia de apellido Araujo, se apropiaron del manantial de agua que por muchas generaciones ha servido para dotar del vital líquido a dicha población.