Ocoyoacac, Méx., 30 de septiembre de 2008.- En el marco de la presentación del programa mexiquense para la conmemoración del Bicentenario de la Independencia, Enrique Peña Nieto hizo un llamado para aprender de la historia y no sólo para evitar los errores de ayer, sino para desterrar la apatía, la desesperanza y los desencuentros. \r\nDijo que se tiene la oportunidad de afianzar valores y normas de conducta, además de replantear actitudes y definir nuevos objetivos para “este gran país”. \r\nPeña Nieto advirtió que México vive momentos trascendentales que exigen unir acuerdos para enfrentar asuntos en temas tan delicados como la seguridad nacional, la injusticia y la inequidad social, entre otros, como el cuidado del medio ambiente y sobre la generación de una nueva cultura de la tolerancia y respeto. \r\n“Para evitar que nuestras diferencias se conviertan en pretexto para el encono o la división entre los mexicanos, México nos requiere a todos, sin acepción, demanda entrega de todos, nos obliga a estar abiertos, nos exige encontrar coincidencias, entendernos y vivir en armonía”, manifestó el gobernador.\r\nPeña Nieto explicó que los festejos del Bicentenario de la Independencia no se tratan de un acto de coyuntura, o que sólo respondan a una moda, sino a una forma de gobernar, ya que desde que asumió el cargo se comprometió a realizar un esfuerzo adicional.\r\nIndicó que el Bicentenario se conmemorará con programas, eventos, acciones y obras que sirvan a los mexiquenses del presente y que sean además “la huella de nuestra acción colectiva para la posteridad”.\r\n