Frustración y suspiros dejó el juego México vs Alemania

Agencia MVT/Filiberto Ramos

TOLUCA, México, 29 de Junio 2017.- Los suspiros se quedaron a medias y la desilusión, acompañada de tragos amargos, comenzó al minuto 5 del partido México contra Alemania por la semifinal de la Copa Confederaciones Rusia 2017.

-¡Mnnnta! no ma…! Y luego un sorbo a la cerveza fría que se había dispuesto en los abarrotados bares del centro toluqueño, luego de caer el primer gol de los alemanes.

A decir de los dueños y empleados de los establecimientos, este jueves se esperaba tener casa llena. Y sí se logró, pero duró menos de los 90 minutos del encuentro, porque los fieles a la Selección Mexicana, y sobre todo al balompié, comenzaron a irse de regreso a las oficinas, a la rutina y a su mundo diario donde sigue resonando esa vocecita: «Sí se puede». La verdad y la realidad es que pocas veces se puede, como esta ocasión.

«La regó por meter a Ochoa, ese ca… es una coladera», reclamaron en todo momento los aficionados que se apostaron en uno de los bares más concurridos de los Portales de Toluca este jueves.

Antes de que pasara el minuto 15 del partido ya todo era desesperanza, desilusión y rabietas, porque los de las casacas verdes no ponían todo en la cancha, se mostraban desconcentrados y sumisos al rival.

FOTO: Agencia MVT / Crisanta Espinosa

-¡Son los alemanes, pero hay que ponerle hue…! -increpaban las voces al correr de los minutos, todos en el papel de entrenadores expertos que miran del otro lado de la pantalla.

Se acabaron esos primeros 45 minutos, abucheos y porras contra el portero Ochoa. Había inconformidad y risas de sarcasmo.

Una segunda y tercera ronda de cervezas frías, en clamato, cubanas, tubos, copas y nada quitaba ese amargo sabor de la derrota anticipada.

«Yo creo que en el segundo tiempo deben poner a Talavera, o a cualquiera menos que repitan a Ochoa», pedían las voces, pero no se les cumplió, el técnico del Tri repitió cuadro.

No pasaron más de los 20 minutos del segundo tiempo y cayó el tercero. Desilusión completa. Se murió el «Si se puede» y apareció «El pluto»…

En un intento de refrescar la cancha se hizo el cambio entre Geovani y Fabián, quien dio el único grito a la afición de los bares toluqueños, con un bombazo que obligo a tener nuevamente esperanza.

Pero se borró dos minutos después, con el cuarto gol absurdo de los alemanes. La fiesta volvió a velorio en las barras y mesas, el tarro se terminó de beber y ya no se volvió a llenar.

FOTO: Agencia MVT / Crisanta Espinosa

Viernes 19 de Abril del 2024 8:25 am