TOLUCA, México, 30 de Mayo.- El Estado de México se caracteriza por su gran variedad de artesanías; en particular en Toluca, en la delegación de Santa Ana Tlapaltitán, existe una familia que se dedica desde hace más de cien años a la elaboración de cestería y artesanía fina de palma.\rDavid Dávila Núñez, artesano mexiquense, explicó que su trabajo se hace con base en la palma, popote y vara de trigo, materiales que se producen en el municipio de Zumpahuacán, porque allá el clima que es más cálido.\rDetalló que sus ventas van de acuerdo a la temporada, pero lo que más se comercializa son paneras, fruteros y dulceros, estos últimos se venden en San Luis Potosí a la empresa productora de dulces regionales Constanzo, cuyos representantes llegan cada año a este taller para comprar sus dulceros.\rDávila Núñez comentó que sus productos se comercializan en Puerto Vallarta, Cancún, Los Cabos, Maztalán y gran parte de Estados Unidos.\r“Parece mentira que el visitante extranjero aprecie más este tipo de productos que los propios mexicanos, es por ello que hacer años saqué un eslogan que decía: compre lo hecho en México no lo de la chinada”, comentó.\rEn su oportunidad, la señora Sofía Núñez viuda de Dávila, comentó que en la Casa de las Canastas se da trabajo a 20 personas en temporada baja y cuando hay pedidos grandes que entregar se contrata a 60 personas más para poder entregar los productos solicitados.\rDijo que desgraciadamente con el paso del tiempo se van perdiendo las tradiciones y artesanía mexicanas, por lo que es necesario hacer una gran campaña para que en México se aprecie de mejor manera esta tipo de trabajos.\rFinalmente, Sofía y David, madre e hijo, mandaron un mensaje a la sociedad mexicana para que consuman productos mexicanos y no extranjeros, recordando que en México existen manos mágicas que crean este tipo de maravillas artesanales.\r