TOLUCA, México, 27 de Oct.- Como resultado de la apertura comercial que se dio en el 2004, el campo ha registrado un desmantelamiento de la planta productiva rural que ocasionó que la producción del maíz se venga abajo y se tengan que importar grandes cantidades de maíz, afirmó Javier Eduardo López Macías, presidente nacional de la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social (UNIMOS). \rSeñaló que el problema que ha tenido el campo son las estrategias y políticas que cada año se implementan y que son las mismas, “mismas que han minimizado los apoyos que reciben los agricultores y que ahora sólo los perciben unos cuantos”. \rAgregó que esta devastación del campo ha dado como resultado que los insumos que requieren estén fuera de presupuesto, por lo que han optado por vender sus tierras para la realización de centros comerciales, desarrollos habitacionales, entre otras acciones, las que les han redituado en importantes ingresos. \rComentó que la producción de maíz ha sido la única que ha presentado problemas en el país, ya que la lenteja o el arroz son granos que también se tienen que importar en cantidades de entre un 65 a 70 por ciento, y todo porque cada vez son menos quienes los producen. \rAseguró que esta situación para el gobierno no ha sido fácil porque ha tenido que recurrir a la importación del grano que en otros país se produce para atender la demanda que se tiene de los grandes consorcios productores de alimentos, sin importar que exterminen las oportunidades de trabajo en el campo agrícola. \r