TOLUCA, México, 2 de Feb.- La desigualdad social es el principal factor que acentúa la violencia, la discriminación y la fatalidad que enfrenta la mujer en el país, aseguró la integrante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Gabriela Cordurier Real.\r\nDurante el Foro para el Desarrollo Integral y Plena Participación de la Mujer, la también integrante del Instituto Nacional de las Mujeres destacó la necesidad de evaluar «cómo, cuánto, quién y en qué se gastan los recursos del Estado, pues sólo así, y detectando las necesidades y condiciones tanto de hombres como de mujeres, se podrá erradicar la desigualdad».\r\nExplicó que actualmente en sólo tres municipios del Estado de México se concentra 43 por ciento de las muertes de mujeres en el parto, y que eso marca los esquemas de desigualdad que prevalecen en el centro del país.\r\nDe todo el gasto público destinado al desarrollo social, indicó, 50.3 por ciento es dirigido al sector masculino y 49.7 por ciento a las mujeres.\r\n»En muchas ocasiones los programas gubernamentales son los que reproducen la desigualdad entre hombres y mujeres», sentenció.\r\nUn caso es el Presupuesto de Egresos 2010, en el que se establecieron erogaciones de 10 mil 920 millones de pesos para el rubro de igualdad entre mujeres y hombres, es decir, 13.6 por ciento del presupuesto de programas sociales, 5.2 por ciento de educación y 12.2 de los presupuestos de salud.\r\n»Las mujeres mexicanas están en una condición de desventaja, en comparación con los hombres, sobre todo en materia de educación, además de que en el 2007, las mujeres representaban el mayor porcentaje de población ocupada no remunerada», denunció.\r\nSin embargo, esta realidad no se refleja en los indicadores internacionales, como el caso del Índice de Desarrollo Humano que en México marca para las mujeres un .7773 en su escala de medida, contra un .7879 de los hombres.\r\n