ZINACANTEPEC, México, 30 de Agosto.- Campesinos denunciaron un millonario fraude de las mesas directivas, saliente y entrante, del Ejido Zinacantepec, entre las cuales “desaparecieron” más de 180 millones de pesos que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pagó a esa representación de poseedores de derechos agrarios por las afectaciones a sus tierras derivadas de la modernización y ampliación de la vialidad Solidaridad Las Torres.\rResponsabilizaron directamente al ex presidente de la mesa directiva del Ejido Zinacantepec, Alberto Reyes Esquivel; al secretario general saliente, Alejandro Palma, y al actual presidente del ejido, Ernesto Palma Mejía, de contubernio para apropiarse indebidamente de más de 180 millones de pesos que debieron repartirse entre los 320 miembros reconocidos con pleno derecho sobre el ejido.\r“Recibieron el cheque de 180 millones de pesos por la indemnización de las afectaciones a las tierras, pero de ese dinero repartieron menos de 30 millones de pesos entre unos 60 ejidatarios, y al resto simplemente no le entregaron nada, porque no somos de sus incondicionales”, acusó uno de los afectados, quien pidió la confidencialidad de su nombre por temor a represalias.\r“Nos tienen amenazados de muerte. No dijeron claramente que si denunciamos o nos quejamos ante alguna autoridad simplemente nos van a matar, para que así se puedan quedar con nuestros derechos parcelarios y menos darnos nada”, precisó otro de los inconformes.\rRelataron que recientemente se realizó una asamblea ejidal en la que participaron representantes de la Comisión Federal de Electricidad y cuando trataron de reclamar el pago de las indemnizaciones, el representante de CFE les dijo “a nosotros no nos pueden pedir que paguemos más de lo que ya entregamos al presidente del comisariado ejidal, Alberto Reyes Esquivel, cóbrenle a él, esas tierras ya están pagadas”.\r“Fue entonces cuando le exigimos cuentas al presidente saliente, Alberto Reyes Esquivel, y al recién designado, Ernesto Palma Mejía, y lo único que logramos es que, apoyados de los incondicionales a los que sí les pagaron, nos expulsaran de la asamblea y nos amenazaran de que si esto se sabía nos iban a matar”, recordó otro de los afectados.\rA pesar de las amenazas, informaron que presentarán esta semana una denuncia formal por fraude y por robo en contra de los integrantes del comisariado ejidal de Zinacantepec. “No vamos a permitir que alguien se quede con lo que legalmente nos corresponde”, puntualizaron.\rDijeron estar plenamente dispuestos a presentarse públicamente y presentar las pruebas que demuestran este fraude y otras irregularidades perpetradas por Ernesto Palma Mejía, Alejandro Palma y Alberto Reyes Esquivel en contra de los auténticos poseedores de los derechos agrarios del ejido.\r“Son dos o tres familias las que se han pasado el poder del ejido; cada vez que hay cambio de mesa directiva quedan los mismos, o sus hijos, o sus padres, o sus parientes cercanos, con eso lo único que hacen es cubrirse la espalda unos a otros y tapar todas las cochinadas que han hechos por décadas”, indicaron.\rAdemás de la desaparición del dinero de los ejidatarios, los inconformes relataron que ese grupo que ha mantenido el poder, en contubernio que algunas autoridades del Registro Agrario Nacional, lograron dar de alta en el ejido hasta a 150 de sus parientes y amigos, a quienes les dieron pleno derecho en las asambleas, por lo que ellos siempre ganan las votaciones.\r“Cuando alguien trata de presentar alguna queja en contra de la mesa directiva, simplemente lo someten a voto y ganan, según ellos democráticamente, pues saben que todas las decisiones les favorecen”, relató un ejidatario.\r“Así es como han sido capaces de mantenerse en el poder y de repartirse el dinero del ejido sin considerar a quienes no estamos de acuerdo con esas tranzas que hacen en el ejido, porque saben que a los que no están de acuerdo los corrompen con dinero o los matan”, concluyeron.\r