Staff MVT
LERMA, México, 26 de Abril.- Tom Haick, representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ONU) en Derechos Humanos visitó este martes la comunidad de Xochicuautla, con el objetivo de constatar el cumplimiento o incumplimiento de los acuerdos alcanzados y suscritos en la Secretaría de Gobernación del gobierno federal, entre las autoridades, la empresa constructora y los afectados por la obra de la autopista Lerma-Naucalpan, que lleva a cabo la compañía Grupo Higa.
Armando García, ex delegado municipal de Xochicuautla, a quien en días pasados la constructora le derrumbó su casa para seguir las obras de la autopista, destacó que la presencia del Alto Comisionado de Naciones Unidas demuestra que los organismos internaciones observan irregularidades en el actuar de autoridades federales y del Estado de México en torno a esa obra.
“Lo único que nosotros exigimos es que se atiendan las medidas cautelares dictadas por la autoridad judicial y que se cumplan los acuerdos suscritos en la Secretaría de Gobernación, y eso es lo que ellos no están haciendo”, señaló.
“Ellos dicen que nosotros somos unos vándalos, pero la verdad es que nos sentamos con ellos, se hacen acuerdos, se firman minutas, pero ellos no los cumplen, ellos no frenan las obras, cuando existe una suspensión ordenada por juez federal”, añadió.
Tom Haick, representante de la ONU, sostuvo una reunión privada con los habitantes de Xochicuautla en el inmueble que ocupa la Delegación Municipal, a puerta cerrada, donde los comuneros y ejidatarios le explicaron ampliamente la situación que enfrentan por su oposición a la construcción de esa autopista.
Los afectados, en su mayoría indígenas otomíes, solicitaron la intervención de las Naciones Unidas para frenar el atentado ambiental que la constructora del Grupo HIGA lleva a cabo.
“Son miles de árboles derivados. Como indígenas pedimos respeto, como ellos quieren que les respetemos. Todos somos dueños de los árboles y todos estamos siendo afectados con esos árboles derrumbados, las consecuencias las vamos a pagar todos, y los hijos de nuestros hijos, porque se acabará el agua, el oxígeno”, le dijeron al representante de la ONU.
También relataron ante el representante de las Naciones Unidas cómo han derrumbado casas de los habitantes de Xochicuautla, sin tomar en cuenta que ese era el único patrimonio de las familias.
“Dijeron que presentarían alternativas para el trazo de la carretera, para que se dejaran de tirar casas, pero tampoco han cumplido, ya se acabó el plazo pactado y no presentaron ninguna opción para la construcción de la carretera, a ellos les importa poco y siguen adelante con sus obras”, remató Armando García.
