TOLUCA, México, 10 de Oct.- Los genios, talentosos, superdotados, sobredotados o niños índigo; es decir, los que poseen aptitudes superiores a las de la población en general debe proporcionárseles atención educativa especial, partiendo de que cada individuo tiene diferentes aptitudes.\rEn el libro la educación del dotado en los niveles G10+ se plantea la necesidad de emplear una enseñanza adecuada a sus potencialidades, por lo que actualmente se busca incrementar la flexibilidad curricular para permitir a cada alumno decidir con libertad sus cargas académicas y, en cierta proporción, las asignaturas que prefiera estudiar.\rEn entrevista, el investigador y coordinador del Centro de Innovación, Desarrollo e Investigación Educativa y profesor en la Facultad de Ciencias de la Conducta y del Nivel Medio Superior de la Universidad Autónoma del Estado de México, Ignacio Morales Hernández comentó que el primer problema para atender a este sector de la población estudiantil, consiste en precisar qué se debe entender por estudiante dotado.\rEl también coautor del libro, explicó que en el texto se enfoca a los alumnos a partir del décimo grado escolar, que en el país corresponde a quienes han concluido los seis grados de primaria y los tres de educación media básica y han ingresado a la educación media superior. “La población estudiantil en los niveles educativos G10+ presenta características psicológicas que los hacen definitivamente diferentes de los alumnos de los grados previos, derivadas del hecho de haber concluido su desarrollo cognitivo”.\rExplicó que un dotado en el área intelectual posee aptitudes superiores para el aprendizaje y crecimiento intelectual, entonces todo programa educativo adecuado a él debe ayudar a su desarrollo, la transformación de la capacidad potencial en desempeño efectivo.\r