TOLUCA, México, 30 de Oct.- De acuerdo con el maestro Roberto Ham Chande, el ahorro económico que se recomienda los adultos tengan para su futuro no garantiza que tengan una buena vejez.
Precisó que no es verdad que ahorrando dinero se podrán adquirir todas las cosas que una persona de edad avanzada necesitará para sostenerse, ya que cuando se llegue a viejo requerirá cubrir necesidades y ello cada vez costará más, por lo que su ahorro no servirá de mucho.
Resaltó que más que tener un ahorro, es necesario que los gobiernos implementen un sistema con productividad suficiente, acompañado de estatutos legales, sociales y económicos para que sea repartido entre toda la gente mayor.
«Está comprobado que los países que atienden mejor a sus viejos son aquellos que tienen una excelente productividad», dijo.
Señaló que este sistema debe estar acompañado de programas sociales, como la pensión, pero garantizando que estos no den privilegios a un sólo sector, sean equitativos, no como los sindicatos como el de PREMEX, que está quebrado porque tiene un sistema de pensiones que le cuesta millones y lo mismo pasa con la CFE y el IMSS.
Refirió que es claro que los actuales gobiernos no tienen la capacidad de atender los problemas que se vienen para los adultos, principalmente los de salud, ya que por ejemplo para el 2030 se tendrán 3 millones de diabéticos tipo dos, por lo que se deberá cuidar la transición hacia las enfermedades crónico discapacitantes, buscando apostarle más a la prevención que al cuidado o tratamiento de éstas.
«No se están abordando los cuidados a largo plazo ni cuánto les costará y si se llegará a tener una ola de enfermedades no se tendría un estimado del pasivo por salud, que es más caro que el pasivo por pensiones», dijo.
Ham Chande comentó que es importante pensar en las proyecciones de lo que viene para los siguientes 20 o 30 años, cuidando la dependencia de la vejez, tomando en cuenta cuestiones de consumo cotidiano, alimento, vestido, medicinas, para que comiencen a crear políticas públicas enfocadas en sus viejos, y en ello es importante que participen también todos los jóvenes.