Agencia MVT / Guillermo Guadarrama
Toluca, México, 31 de julio de 2018.- Luis «Wicho» Castañeda ha hecho de los golpes su estilo de vida, primero como estrella de Muay Thai y luego como entrenador de la misma disciplina de contacto.
El gladiador originario de la Ciudad de México pero avecindado y forjado en Toluca, por el momento se encuentra como seleccionado de la Federación Mexicana de Muay Thai, (IFMA) siendo representante de este país ante el mundo en los eventos y torneos de esta disciplina.
A lo largo de su carrera, ha logrado ser campeón nacional y mundial en Kick Boxing, Sambo, K1 y su especialidad el boxeo tailandés (Muay Thai) en la categoría de los 77 kilogramos, además de ser reconocido en gran parte del mundo.
Castañeda tiene un récord de 62 peleas profesionales, 40 victorias de las cuales 25 fueron por la vía del cloroformo (nocaut), 20 derrotas y 2 empates, siendo en Argentina donde el mexicano ganó el campeonato mundial de Kick Boxing de la WKC ante Nicolás “El Picante” Ryske y su ultima defensa fue en agosto del 2014 en la Ciudad de México ante Julián “El Pollo” Fedoruk.
En su formación como peleador, Wicho se preparó en academias como RinoTEAM y el Deportivo Agustín Millán de la capital mexiquense, aunque también pudo residir un tiempo en Tailandia para terminar de formarse en las disciplinas de contacto.
“Allá si se puede vivir de este deporte además también puedes ser promotor, entrenador y como parte de su cultura están bien protegidos, si se llegan a lastimar pero no pasa nada y aquí de inmediato te mandan a descansar pero no puedes hacer nada”, comentó el campeón de Muay Thai.
“Aquí sí se puede vivir pero cuesta más trabajo, tienes que escarbarle un poco más, es una inversión, pero si quieres nada más pelear pues ya ganas algunos pesos, pero si quieres salir pues afuera la paga es mucho mejor”, expuso.
Aseguró que no siempre fue apoyado por las autoridades para seguir su carrera, ejemplificando que algunos de sus viajes a los diferentes países e incluso dentro de México con fines de competición, fueron pagados de inversión propia.
Aunque sus logros son de gran peso dentro de los deportes de contacto, Wicho Castañeda subrayó que lo más satisfactorio de su carrera es el haber podido conocer diferentes partes del mundo y llevar al país a lo alto dentro de las diferentes disciplinas y el haber terminado una carrera universitaria, misma que fue gracias a su esfuerzo y dedicación dentro del Muay Thai como pudo pagarse sus estudios.
Después de varios años como peleador, hoy Wicho Castañeda ha optado por ser entrenador, a lo que explicó que es un trabajo aún más difícil pues los nervios previos a las peleas de sus alumnos son más fuertes que cuando era él quien subía al encordado.
“La verdad es que yo me pongo más nervioso viendo a mis chavos pelear que cuando peleo yo mismo, ahora entiendo a mis maestros, también no falta el alumno que se pone rejego y no quiere hacer las cosas pero es una buena experiencia poder compartir mis conocimientos”, dijo.