TOLUCA, México, 31 de Enero de 2011.- El Tribunal Electoral del Estado de México resolvió a favor del Instituto Electoral mexiquense y se negó a la propuesta del PAN para poner mayores candados en las boletas que se utilizarán en las elecciones del próximo 3 de julio.\r\nAsí se resolvió el recurso de apelación RA/012/2011 presentado por el Partido Acción Nacional (PAN) en contra del Consejo General del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), por violación a los principios de certeza y legalidad por parte del Consejo General, al no haber admitido la propuesta de incluir un punto en el acuerdo para explotar la posibilidad de incluir el hilo discontinuo como medida adicional de seguridad en las boletas electorales.\r\nEl magistrado Héctor Romero Bolaños puso a consideración del Pleno del Tribunal Electoral confirmar el acuerdo IEEM/CG/66/2010 por el que se aprobó el «Diseño de la Documentación Electoral para el Proceso Electoral 2011», en virtud de que la propuesta del PAN sí fue tomada en cuenta, tanto que la Dirección de Capacitación y Organización realizó un estudio sobre la conveniencia de agregar un hilo discontinuo, encontrando que este es un trabajo que únicamente realiza el Banco de México.\r\nRomero Bolaños añadió que las medidas de seguridad con que hoy cuentan las boletas electorales sí pueden ser visibles. Más aún, precisó, existe un mecanismo que puede ser utilizado por los partidos políticos para verificar, el mismo día de la elección y a simple vista, que las boletas utilizadas son las aprobadas por el Consejo General, que es el sello que se asienta en el dorso de las mismas y la posibilidad que tienen para que sus representantes las firmen, lo cual se encuentra previsto en los artículos 188, fracción IV y 197, segundo párrafo del Código Electoral.\r\nEs importante recordar que las medidas de seguridad de las boletas electorales son nueve, entre las que destacan una pantalla de seguridad en toda la hoja; una marca de agua tanto en la impresión como en el papel seguridad; cuenta con líneas en micro texto distribuidas en distintos lugares; una leyenda con tinta invisible al reverso, y las firmas de los representantes del Consejo Electoral de manera invisible.