Staff MVT\r\nTOLUCA, México, 6 de Febrero.- La ciudad de Toluca cuenta con un amplio patrimonio construido, integrado por 612 inmuebles de los siglos XVI al XX, los cuales son protegidos por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la delegación del Centro INAH del Estado de México, señalaron los profesores e investigadores Jonathan Hernández Omaña y Mercedes Ramírez Rodríguez.\r\nDestacaron que a partir del mes de mayo de 2012, el centro histórico de la ciudad de Toluca se integró de la siguiente manera: una zona formada por 2.81 kilómetros cuadrados y 183 manzanas, con elementos tales como parques, jardines, plazas y monumentos emblemáticos de la ciudad.\r\nEsta zona, manifestaron, se compone por el primer y segundo cuadro del centro histórico de la ciudad de Toluca y el área de protección patrimonial, la cual contiene los elementos antes mencionados.\r\nIndicaron que dentro de la zona de protección patrimonial de la ciudad se observa a simple vista, un gran número de inmuebles catalogados y que presentan deterioros, atribuidos a causas naturales o inducidas; sin embargo, puede ser solucionado y con ello, garantizar el bienestar y la permanencia de los inmuebles.\r\nPor lo anterior, sostuvieron que existe la necesidad de instrumentar nuevas metodologías para medir el estado de deterioro de los inmuebles, a través de investigación de campo que permita determinar el nivel de deterioro.\r\nPor ejemplo, la Calle Villada es una de las que mayor número de inmuebles catalogados tiene, con los siguientes niveles de deterioro: Humedades, 54.54 por ciento; desprendimientos de aplanado, 22.72; fisuras, 4.54; elementos dañados, 36.36; faltantes, 36.36, y agregados, 77.27; además de presencia de vegetación, como limos u otros, 22.72.\r\nJonathan Hernández Omaña y Mercedes Ramírez Rodríguez aseveraron que la metodología propuesta para medir el deterioro de los inmuebles cuenta con un diseño que permite medir de manera tangible el daño de los edificios con valor histórico.\r\nReconocieron que entre las ventajas de la metodología se incluye la visualización de manera directa, de cada uno de los edificios a evaluar y llevar a cabo un diagnóstico en diferentes escalas; por ejemplo, una calle, una manzana o un área específica, entre otras.\r\nSin embargo, indicaron, la metodología puede ser adaptada a las necesidades específicas de cada área a estudiar, debido a que se pueden eliminar o proponer nuevos indicadores, siempre y cuando sean factores tangibles; es decir, se puede utilizar por todos los especialistas e instituciones encargadas de preservar el patrimonio construido de cualquier ciudad, región o país.