TOLUCA, México, 3 de Nov.- El presidente del Tribunal Superior de Justicia, Baruch Delgado Carbajal, manifestó que los Estados que no respetan ni garantizan los derechos fundamentales de las personas son estados muertos o condenados a perecer.\r\nDurante la ceremonia solemne en la cual, junto con otros 15 destacados profesionistas, ingresó como miembro de la Legión de Honor Nacional de México A.C., institución académica integrada por personajes e intelectuales de reconocida trayectoria pública, el magistrado Baruch Delgado sostuvo que los Estados Democráticos del Siglo XXI se fundamentan en la Constitución, como base de su marco jurídico, así como en el respeto de los derechos humanos y el cumplimiento puntual y absoluto de la ley.\r\nHizo hincapié en que el respeto a los derechos de los demás, es un principio que no ha dejado de tener vigencia, sobre todo en el mundo globalizado de hoy.\r\nEl titular del Poder Judicial mexiquense, que al ingresar a dicho organismo presentó la tesis recepcional Transición al Sistema Penal Acusatorio, explicó que en congruencia con la tradición jurídica y libertaria de México, se realizó una Reforma Constitucional para más que adoptar, adaptar y crear un sistema de justicia penal propio, auténticamente nuestro.\r\nUn sistema característico de los estados democráticos modernos, basado en el respeto a los derechos humanos de las personas y fundado en el principio de presunción de inocencia, que pone a nuestra nación a la altura de los países más avanzados del mundo, aseveró.\r\nSostuvo que la histórica reforma en materia penal, ofrece la garantía de un juicio justo, además de que también es garantista, protectora de la libertad y los derechos fundamentales del individuo.\r\nCon dichas reformas, apuntó, hemos dejado atrás el sistema inquisitorio, anquilosado y caduco que ya no respondía a nuestra realidad y tampoco a nuestro avance democrático.\r\nAñadiendo además, que la reforma en materia de derechos humanos, que no fue otra cosa más que la constitucionalización del derecho internacional en la materia, vino a fortalecer a la citada reforma penal.\r\nBaruch Delgado concluyó que ambas reformas constituyen un parte aguas que estableció un antes y un después, un cambio de época que ha transformado de manera sustancial el marco jurídico.\r\n