José Contreras Contreras\r\n\r\nTOLUCA, México, 9 de Dic.- En menos de una semana, Salvador y Yair Rico restaurarán más de cien imágenes de la Virgen de Guadalupe, para que el próximo 12 de Diciembre luzcan completas, coloridas y brillantes, para ser llevabas a bendecir, en una de las fiestas religiosas más importantes para el pueblo de México.\r\nSalvador Rico lleva 17 años dedicado a la restauración de imágenes religiosas, actividad que mezcla con su afición musical, la cual también desarrolla en términos profesionales para allegarse de recursos económicos para él y su familia.\r\nSin embargo, confesó que la restauración de imágenes es una actividad que demanda demasiado tiempo, pues requiere de esmero y paciencia para llevarla a su máxima dimensión.\r\nPrecisó que la restauración va más allá de pegar o pintar, pues requiere de mucho sentimiento, porque cada una de las imágenes religiosas representa algo muy importante para la familia a la que pertenece.\r\n»Una imagen de una Virgen, un Cristo o un Niño Dios, ocupan un lugar muy importante en las casas de las familias. Para los mexicanos estas imágenes son parte de la misma familia, incluso son algo a lo que se encomiendan, a lo que le confían sus propias vidas», explicó.\r\nSalvador Rico indicó que, junto con su hermano Yair, han llegado a restaurar en una buena temporada más de cien imágenes. Dijo que las fechas más importantes son precisamente el 12 de Diciembre, por la festividad de la Virgen de Guadalupe, y el 2 de Febrero, cuando se celebra la Candelaria y las familias llevan a presentar a la iglesia las imágenes del Niño Dios.\r\nAbundó que cada restauración es única, diferente, pues se trata de piezas originales, de diferentes tamaños, a las cuales les ocurre cada vez algo diferente que es necesario atender.\r\n»Nos traen figuras con pequeñas imperfecciones, como lo es un dedito raspado o un pequeño golpe en la base, pero también hay algunas que vienen totalmente destruidas, rotas, sin partes importantes como lo son los ojos, las manos o una pierna, y esas son las que requieren de atención muy particular», relató.\r\nEl artesano señaló que los precios son estimativos, no existe un tabulador para cobrar al cliente, sino que se acuerda conforme al daño de la pieza y al tipo de material que se empleará para la reparación, pues hay de yeso, de resina, de madera y hasta de porcelana, lo que encarece el trabajo.\r\nApuntó que, en términos generales, un trabajo de restauración de cobra desde los 30 o 50 pesos cuando se trata de daños menores, hasta 250 pesos cuando verdaderamente las figuras vienen muy afectadas.\r\n»Este es un trabajo que se tiene que hacer con cariño, con amor, con dedicación, pues para nosotros cada Virgen, Cristo, Niño Dios o Santo que nos traen es como atender a una persona, pues cada uno es muy especial para las familias, y ellas confían que se las regresemos en perfecto estado», concluyó.\r\n