Agencia MVT / Staff
TOLUCA, México, 20 de Marzo.- Pobladores de El Cerrillo Vista Hermosa, al norte del municipio de Toluca, se manifestaron en la parroquia de la localidad y exigieron la salida del padre “Joel”, a quien acusaron de pretender los usos y costumbres religiosas de la comunidad, lo que ya provocó incluso una explosión de material pirotécnico presuntamente mal almacenado en el campanario de esa iglesia.
Santos Bonifacio de Jesús, uno de los vecinos, explicó que el padre Joel opera con un tabulador para cobrar cada tipo de misa, hasta por 2 mil pesos, de acuerdo con las características de cada una.
“La palabra de Dios se regala, no se cobra”, dijo, y señaló que otra irregularidad se registró en la designación de la Mayordomía de El Cerrillo, pues tradicionalmente se integraba por seis matrimonios, y, ahora, por decisión del cura, solamente se nombró a un matrimonio.
Señaló que el padre “Joel” se quiso hacer cargo, solo, de la fiesta patronal, “pero le quedó grande el festejo”, y prueba de ello fue la explosión de pirotecnia que se registró en el campanario, pues mandó guardar los fuegos artificiales en un lugar no apto para tal propósito, lo que causó la destrucción parcial del inmueble.
Félix de la Cruz, otro de los inconformes, exigió se realice un peritaje técnico a cargo de Protección Civil para que se determine si la iglesia puede o no operar después de la explosión, pues, desde su punto de vista, ésta constituye un peligro para la comunidad católica que acude todos los días a misa, pues se puede caer de un momento a otro por presuntas fallas estructurales.
Señaló que el Obispo de la Diócesis de Toluca ya tiene conocimiento de estas y otras irregularidades en la actuación del cura al que únicamente conocen como “Joel”, pero advirtió que por necedad intentan mantenerlo en esa iglesia, lo que ya causó el malestar de toda la comunidad.
También responsabilizaron al párroco de un accidente que se registró durante la fiesta patronal. “Nunca se queman los toritos dentro del atrio de la iglesia, porque es peligroso, pero a él se le hizo fácil y quemó el torito dentro, se escapó un buscapiés y hubo quemados”, dijo Santos Bonifacio.
“Lo que pedimos ahora es que el padre se salga de aquí, con sus grupos, que se vaya el sacerdote”, dijeron los inconformes, y advirtieron que el problema puede subir de nivel, pues ya se registraron enfrentamientos entre quienes apoyan al párroco y quienes exigen su salida.