Toluca, Méx., 14 de mayo de 2008.- La reestructuración de la deuda pública del Estado de México, antes que verla como un logro, hay que señalarla como una acción tardía, pero necesaria para disponer de mayores recursos en beneficio de los mexiquenses, señaló el presidente de la Comisión de Finanzas Públicas de la LVI Legislatura local, Tomás Octaviano Félix.\r\nSin embargo, acusó al Ejecutivo mexiquense de usar esa coyuntura para protagonizar un “acto faraónico”, que más que informar a los mexiquenses sobre lo realizado, buscó elevar la imagen personal del mandatario, para lo que incluso “uso” al secretario de Hacienda y Crédito Público, Agustín Cartens.\r\nRecordó que la autorización que aprobó la Legislatura para que el Ejecutivo renegociara su deuda, permitía la reestructura de 28 mil 965.8 millones de pesos, el mejoramiento de los plazos de amortización y la obtención de tasas más competitivas. \r\n“Todo con el objeto de generar un mayor flujo de efectivo, en alrededor de 820 millones de pesos, que se destinarían a obras y acciones a favor de los mexiquenses”, precisó.\r\nOctaviano Félix dijo que en aras de una mayor transparencia y de una rendición de cuentas al respecto, se propuso la conformación de un Comité Especial de Seguimiento y Evacuación y la obligación de que el Ejecutivo informe de manera trimestral al Poder Legislativo sobre los actos jurídicos, operaciones y funcionamiento del fideicomiso, objeto de la reestructura.\r\nDe la misma forma, comentó que la reestructuración anunciada por el gobernador Enrique Peña Nieto cumplió con las expectativas plasmadas en el decreto de autorización, excepto por los 607 millones de ahorro.\r\nAseguró que esto no es un gran logro de la presente administración, tan solo es una solución al grave problema financiero de la entidad heredó por malos gobiernos emanados del PRI.\r\nEl presidente de la Comisión de Finanzas Públicas de la Legislatura local señaló que desde que asumió el cargo destacó los grandes problemas en materia de finanzas y administración que encabeza Enrique Peña Nieto son el alto nivel de endeudamiento, un elevado gasto corriente, falta de eficiencia del gasto público, poca transparencia, alta corrupción y una alta carga burocrática.\r\nSeñaló que la calificadora Fitch Ratings otorgó al crédito del Estado de México la calificación BBB, donde destaca que las limitaciones de esta calificación son un elevado nivel de deuda, en términos de ingresos disponibles y ahorro interno; incremento al gasto corriente, principalmente en el capítulo de servicios personales, entre otros.\r\nFinalmente, dijo no estar de acuerdo con la forma faraónica en como se llevó a cabo el evento del pasado martes, ya que más bien pareció una promoción a la imagen personal del gobernador con miras al 2012.