Cynthia Gómez Colín\r\n\r\nTOLUCA, México, 2 de Mayo.- A pesar de que el consumo excesivo de sal genera enfermedades cardiovasculares como hipertensión arterial, insuficiencia renal aguda y crónica, la sociedad continúa teniendo ese mal hábito y ante este lo recomendable es que se comience a tener una educación para la salud.\r\nAlejandra Benítez Arciniega, profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), destacó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un máximo de 2 gramos de sal común en la mesa o adicional en los alimentos, y eso se traduce a un máximo de 5 miligramos al día, cantidad muy baja pero segura.\r\nPrecisó que el Cloruro de Sodio, la sal comestible o casera, no es mala, ya que incluso en México se le adiciona Yodo y Flúor nutrimentos positivos para la población; sin embrago, lo que la hace un componente en la dieta de riesgo es su consumo en exceso.\r\n»Se debe evitar el consumo de sal en la mesa y favorecer condimentar los alimentos con especias o aromáticos naturales en lugar de sabroseadores y concentrados», dijo.\r\nPor último, Benítez Arciniega indicó que lo recomendable es evitar el uso de sal adicional en los platillos, así como la combinación de embutidos con alimentos de origen animal porque con ello se duplica la cantidad de sodio, y favorecer la ingesta de frutas y verduras en cualquier tipo de alimentación para que así esta sea sana.\r\n