Staff MVT\r\nTOLUCA, México, 3 de Febrero.- Se deben considerar los nuevos proyectos de comunicación: el tren interurbano México-Toluca y la ampliación de la carretera México-Toluca, así como tomar en cuenta la participación activa de la sociedad, en este caso, de los prestadores de servicios y las instancias correspondientes.\r\nPara ofrecer alternativas sostenibles de orden físico y espacial, que contribuyan a detener el crecimiento de los nuevos asentamientos humanos en La Marquesa, Emilio Alfonso Castaños Mejía, José de Jesús Jiménez Jiménez y Mirna Ocádiz Soto, especialistas de la Universidad Autónoma del Estado de México, proponen establecer un esquema de ordenamiento físico y espacial que permita conectar las actividades de la franja del corredor La Marquesa-Salazar.\r\nAl hablar, en conferencia, sobre el «Modelo para el estudio de los asentamientos humanos en el paraje La Marquesa, sus efectos e impactos por la carretera México-Toluca», señalaron que dentro del ordenamiento se deben considerar los nuevos proyectos de comunicación: el tren interurbano México-Toluca y la ampliación de la carretera México-Toluca, así como tomar en cuenta la participación activa de la sociedad, en este caso, de los prestadores de servicios y las instancias correspondientes.\r\nLos expertos de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la UAEM destacaron que al ser La Marquesa una comunidad donde predominan las actividades comerciales y servicios turísticos, demanda servicio de infraestructura; sin embargo, con el paso del tiempo, la práctica de estas actividades va en aumento, como también la dispersión de estos servicios a lo largo de la carretera México-Toluca y en el territorio del Parque Nacional «Miguel Hidalgo y Costilla».\r\nSostuvieron que en una visión a futuro implica que los nuevos asentamientos humanos acaben con la zona, generando mala calidad de vida para la gente que realiza actividades comerciales y turísticas en La Marquesa y en especial, la calidad de vida de los territorios más cercanos, como la ciudad de México y la zona conurbada, con la ineficiente estructura de servicios básicos, la anarquía y las incongruencias de leyes y planes de ordenamiento urbano.\r\nA esto, puntualizaron, es necesario sumar la necesidad de las personas, así como el desconocimiento de lo que se puede, lo que se debe y no hacer, que afecta la lógica del funcionamiento integral de la zona.\r\nLos universitarios, consideraron, sin embargo, que la principal causa de la problemática en el corredor La Marquesa es el uso del suelo, puesto que se trata, en su mayoría, de terrenos ejidales de la comunidad de San Jerónimo Acazulco; «por tanto, la infraestructura urbana es en su mayoría improvisada, preocupando que la dispersión del comercio sea de forma no controlada, producto de la oferta y la demanda detonados por la accesibilidad que ofrece la carretera México-Toluca».\r\nAsí, indicaron Emilio Alfonso Castaños Mejía, José de Jesús Jiménez Jiménez y Mirna Ocádiz Soto, es frecuente encontrar comercios abandonados, que son producto de una escasa planeación y de la ausencia de conocimientos con respecto a urbanismo, mercadotecnia y ecología.