TOLUCA, México, 22 de Enero.- Ante el cambio climático que se presenta a nivel mundial, especialistas de la Universidad Autónoma del Estado de México advierten que de no lograr mejores condiciones ambientales podrían aparecer zonas semidesérticas en el norte de la entidad, ya que en los últimos años se ha tenido una reducción importante en los niveles de lluvia.\r\nGuadalupe Ortega, especialista en temas de Ecología de la UAEM, advirtió que en los últimos tres años municipios como Acambay, San Felipe del Progreso, Aculco y Atlacomulco han presentado niveles de lluvia por debajo del 60 porciento de su media histórica, lo que ha provocado una reducción en los embalses naturales, represas y bordos, así como baja producción agrícola en la región.\r\nLa especialista señaló que a pesar de que en el norte del territorio mexiquense aun no se presentan niveles de sequía como en otros estados del país, es preocupante la situación que se podría vivir en estas zonas a mediano plazo, ya que la escases de granos y las pocas reservas hídricas en la región pueden provocar una crisis alimenticia en los próximos años.\r\nSeñalo que debido a fenómenos como el de «La Niña», que son cada vez más frecuentes, se presenta un panorama obscuro en cuestión de reservas hídricas, no solo para el estado sino para todo el país, ya que los fenómenos que se presentan en el norte de la nación podrían repetirse en territorios más al sur, como Jalisco, Querétaro y el Estado de México.\r\nAdvirtió que se deben de tomar medidas en los próximos años para evitar que se tenga verdaderamente una crisis alimentaria, por lo que es necesario iniciar con la conversión agrícola de siembra de temporal a cultivos de invernadero, así como una utilización más racional del agua en el Estado de México.