Filiberto Ramos\r\n\r\nTOLUCA, México, 28 de Agosto.- A sus 76 años, cumplidos en marzo pasado, Sotero Morales Alcántara continúa levantándose todas las mañanas a las 5:30 horas para salir a correr por su cuadra, regresar 30 minutos después, usar 20 minutos para su baño matutino, un desayuno ligero y se enfila rumbo a los Portales de Toluca, donde desde hace 12 años tiene su silla de bolero que heredó de su padre.\r\nEl bolero cuenta que desde joven ingresó a una escuela de mecánicos en Toluca, donde salió y se especializó en el sector, y después de algunos años estableció su propio negocio, pero, según narra, las envidias del oficio y una racha de mala suerte hicieron que una noche le quemaran su taller que tenía en la avenida Alfredo del Mazo.\r\n»Iba yo bien con mi negocio, pero ya sabe, las maldades y envidias, un doce de diciembre me quemaron el taller que había levantado con mis ahorros y fruto de mi trabajo, me quedé endrogado porque se quemaron varios carros que estaba reparando y tuve que pagarlos», recordó el hombre de la tercera edad.\r\nTras su desgracia, Sotero Morales quedó deprimido por varios meses, pues aunque sus ocho hijos ya eran grandes, el hombre asegura nunca dependió de nadie para sobrevivir.\r\nFue entonces que pensó en el cajón de bolear de su padre, quien en su vida tuvo de oficio ser lustrador de calzado, el cual Sotero Morales decidió continuar al no poder levantar nuevamente su taller mecánico.\r\n»Mi padre tuvo por oficio el ser bolero, entonces yo aprendí de él; al principio comencé a trabajar su silla aquí en los Portales, pero mis hermanos decidieron venderla, pero después el que ahora es mi patrón la compró y me dijo que si quería trabajarla, y desde entonces aquí estoy», explicó Morales Alcántara.\r\nOriginario de la colonia Los Ángeles, ubicada a un costado de La Maquinita, donde vive con su esposa, el bolero aseguró que hasta esta etapa de su vida le ha llegado la tranquilidad, pues además de dedicarle tiempo a su oficio de bolear, asiste cada domingo a los encuentros religiosos en una iglesia evangelista, además de cada tiempo libre durante el día sacar su biblia que lleva consigo y leer algún capitulo.\r\nIncluso dijo, hasta su silla acude cada medio día un joven al que guía en las lecturas de la biblia.\r\nEl hombre de la tercera edad es de los cuatro lustradores de su edad que laboran en Los Portales de Toluca, quienes festejaron el Día del Adulto Mayor con cepillos y grasas en las manos para limpiar el calzado.\r\nDe acuerdo con el INEGI, actualmente la población de 60 años y más en el Estado de México es de 1 millón 137 mil 647 habitantes, equivalente al 7.4 por ciento de la población total.\r\nEn 2010, el 11.4 por ciento de los ancianos de la entidad dependían económicamente de alguien más, estadística que para el 2020 se estima que llegue al 25.8 por ciento, debido a la falta de fuentes laborales para dicho sector.\r\n