TOLUCA, México, 5 de Sep.- Rosario Robles Berlanga, ex militante del Partido de la Revolución Democrática y ex jefa del gobierno del Distrito Federal, aseguró que siempre será de izquierda, pese a que se incorpore al equipo de transición del Presidente Electo, Enrique Peña Nieta, como vice coordinadora de Política Social.\r\nEntrevistada a su arribo al Primer Informe del Gobernador de Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, habló de su responsabilidad en el equipo de transición del Presidente Electo, y dijo que más que considerarse como un puente entre la izquierda y la futura administración federal, se trata de «incorporar al equipo de Peña Nieto una visión evidentemente de izquierda».\r\nDijo que no necesariamente representa una tendencia sino una preocupación por compartir con el presidente Enrique Peña la necesidad de resolver los problemas de la pobreza y la desigualdad.\r\nEn cuanto al papel de la izquierda en México ante un gobierno federal priista, Robles Berlanga enfatizó que espera que la izquierda ponga sobre la mesa una agenda social coherente, con los más de 15 millones de votos que tuvo el primero de julio.\r\nA pregunta expresa, puntualizó que siempre será de izquierda, aun cuando haya sido invitada a trabajar en el equipo de Peña Nieto.\r\nCabe recordar que hasta 2004, Rosario Robles militó en el PRD, al que perteneció por más de 15 años. Este martes, el priista Peña Nieto la integró a su equipo de transición nombrándola vice coordinadora de Política Social, un área que está bajo la responsabilidad de Luis Videgaray.\r\nEn abril, Robles dijo en una entrevista radiofónica que apoyaría la campaña de candidato presidencial del PRI a través de la red ciudadana Mexicanas Comprometidas por la Paz.\r\nHace siete años, su proceso de expulsión del PRD inició cuando salieron a la luz pública los llamados video escándalos, en los que se observaba al empresario Carlos Ahumada entregando dinero a funcionarios del gobierno del DF, entre ellos, René Bejarano.\r\nRobles, entonces pareja sentimental de Ahumada, fue acusada de ser el nexo de éste con algunos perredistas, incluidos delegados que presuntamente lo favorecieron con contratos millonarios en el ramo de la construcción.\r\nRenunció al PRD antes de ser expulsada, cuando era investigada por presunto tráfico de influencias.\r\nLa ex funcionaria tiene 56 años, fue jefa del gobierno del DF de septiembre de 1999 a diciembre del 2000, en sustitución de Cuauhtémoc Cárdenas, quien dejó el cargo para contender por la presidencia de México. Desde 2007 es socia fundadora de la alianza empresarial Sostén Centro de Inteligencia, dedicada a brindar asesoría en campañas electorales, particularmente de mujeres.