Agencia MVT / Guillermo Guadarrama
Toluca, México, 17 de octubre de 2018.- La construcción del nuevo aeropuerto en La Ciudad de México (NAICM), con posibles bases en Santa Lucía o la rehabilitación del de Texcoco, se puso en debate este miércoles en la Sala Benito Juárez de la Cámara de Diputados mexiquense a través del Foro Escucha “El aeropuerto frente a todas las alternativas”.
En este foro expertos en el tema, así como diputados de esta LX Legislatura mexiquense encabezado por la presidenta de la misma, Azucena Cisneros Coss y del próximo vocero del gobierno federal, Jesús Ramírez, analizaron las alternativas para el nuevo aeropuerto de México.
Este ejercicio ciudadano contempla la impresión de más de 500 mil boletas, mil 73 mesas distribuidas en plazas públicas de 538 municipios de los 32 estados del país, de los cuales 80 municipios serían mexiquenses.
El motivo de este foro fue para dar a conocer la postura de los ciudadanos ante esta obra, pues comentaron que es necesario generar proyectos a través de una democracia asegurando que con el cambio de gobierno, Andrés Manuel López Obrador generará este tipo de iniciativas para dejar de tomar decisiones que beneficien a pocos.
«Necesitamos tener una democracia participativa porque aparentemente este tema no es de nuestra incumbencia, pero es un problema que nos afecta a todos, necesitamos preguntar antes de actuar y para eso requerimos de una democracia participativa en el país», se comentó en este foro de participación ciudadana.
Entre las múltiples incógnitas se encuentran razones geológicas, hidrológicas y aeronáuticas de las cuales uno de los principales problemas que tiene esta construcción conllevan a daños ecológicos como la contaminación ya que -argumentaron- que los aviones son principal contaminante en el país.
Esta construcción podría realizarse en dos partes de las cuales, al menos la primer fase que se encuentra en construcción de tres de las seis pistas consideradas, ha tenido un monto de 169 millones de pesos, lo que se estima que en total serán 285 millones de pesos.
Además del alto costo, la destrucción ambiental y de tierras de grupos originarios son parte de los problemas que trae consigo.
«La defensa del pueblo no solamente es de los macheteros y del comité contra el NAICM, sino de toda la ciudadanía y organizaciones pero principalmente de los pueblos indígenas, se debió de haber preguntado a la sociedad antes y no trabajar en este proyecto de manera ilícita», comentaron ciudadanos presentes en este foro.