Staff MVT\r\n\r\nTOLUCA, México, 17 de Marzo.- La enfermedad causada en las rosas por el hongo mildiu velloso ha tenido como consecuencia daños económicos significativos en una gran diversidad de cultivos, sostuvo el investigador de la Universidad Autónoma del Estado de México, Justino Gerardo González Díaz, quien indicó que en la actualidad, este patógeno genera fuertes pérdidas en países como Colombia (50-70 por ciento), Estados Unidos (80), Nueva Zelanda (80-100) y México (50-100 por ciento).\r\nAnte esta situación, académicos del Centro Universitario UAEM Tenancingo proponen como solución el uso del fosfito de potasio, cuya aplicación tuvo una alta efectividad biológica en el control del hongo en el cultivo de la rosa en invernadero, por lo que es una alternativa viable para su eliminación y una opción con un bajo riesgo para la salud humana y el medio ambiente.\r\nJustino Gerardo González Díaz, coautor de la investigación «Fosfitos como alternativas de manejo del mildiu velloso del rosal», refirió que este hongo es uno de los principales problemas fitosanitarios en el cultivo de rosa en invernadero en México.\r\n»La búsqueda de alternativas biocompatibles para el manejo de esta enfermedad es una necesidad urgente, debido a que en la actualidad su manejo se hace exclusivamente con fungicidas y las aplicaciones consecutivas tienen la desventaja de favorecer la aparición de razas resistentes».\r\nLos objetivos del trabajo de investigación realizado, puntualizó Justino Gerardo González Díaz, fueron evaluar el efecto de dos diferentes formulaciones de fosfito de potasio, solas y en combinación con mefenoxam para el manejo de la enfermedad en rosa, así como determinar su efecto en la longitud, diámetro de tallo y contenido de clorofila total.\r\nExplicó que para su control se han usado fungicidas de origen sintético que afectan al medio ambiente; sin embargo, estudios recientes demuestran que los fosfitos tienen una acción directa e indirecta en patógenos, a través de la inhibición del crecimiento del patógeno y la activación de los mecanismos de defensa naturales de las plantas.\r\nLos resultados de la evaluación del fosfito de potasio, detalló, indicaron que el tratamiento con menor incidencia y severidad representó una efectividad biológica promedio de 75 a 94 por ciento; de esta manera, se demostró que el fosfito de potasio tiene un alto control sobre el patógeno y una mayor efectividad biológica que el tratamiento con fungicida.\r\nSubrayó que el interés por los fosfitos tiene como sustento su acción fungicida; «se ha demostrado que en las raíces, el fosfito inhibe el hongo y estimula los sistemas de defensa de las plantas contra patógenos, acción visible en el incremento del tamaño de los tallos de rosa».\r\nSin duda, concluyó Justino Gerardo González Díaz, el fosfito de potasio es una alternativa biocompatible y eficiente en el manejo del mildiu velloso en rosal.