Eduardo González
TOLUCA, México, 16 de Mayo.- A su regreso a la capital mexiquense, los campeones Potros de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) coincidieron en señalar que vivieron un verdadero infierno en Tamaulipas, debido a los actos de violencia que se presentaron en la casa de la Jaiba Brava.
Enardecidos pseudoaficionados de Tampico Madero invadieron la cancha para evitar que los mexiquenses fueran coronados, también intentaron robar la Copa de Ascenso, además en las gradas y fuera del estadio se registraron varias peleas entre aficionados, así como con cuerpo de seguridad del estadio, dejando al menos 32 lesionados.
Omar Ramírez Lara, director técnico de los Potros UAEM, describió las agresiones que sufrió su equipo en el estadio Tamaulipas.
«En el momento que termina el partido vemos la invasión a la cancha, nos metimos al vestidor, nos siguieron, nuestros familiares y cuerpo técnico sufrieron agresiones en los palcos, gracias a Dios no pasó a mayores, pero eso no puede suceder en el futbol, estuvimos muy cerca de una desgracia, esto no puede quedar así», indicó Ramírez.
El estratega auriverde manifestó que la Federación Mexicana de Fútbol tendría que imponer una sanción muy fuerte para el equipo de Tampico Madero, por los hechos de violencia en su estadio, situación que cada vez más se repite en el país.
«Estuvimos cerca de tres horas en el vestidor, la gente del cuerpo técnico entraba golpeada, llorando, no nos permitieron disfrutar nada, había muchos golpes, la seguridad del estadio no era gente profesional, eran improvisados, eso permitió todas las agresiones, nos lanzaron botellas y piedras, algo lamentable «, dijo.
Los jugadores del equipo verde y oro también quedaron muy asustados por los hechos en Tamaulipas, lamentando lo que pasó, historia que no desean volver a vivir en sus carreras deportivas.