CHIMALHUACÁN, México, 7 de Marzo.- Una joven de 16 años que fue atacada sexualmente sufre burlas del Ministerio Público y de su agresor; situación en la que se presume que hay dinero de por medio y corrupción departe de la autoridad ministerial.\r\nLa afectada enfrenta además la negligencia y prepotencia del servidor público de La Mesa 1 del Centro de Justicia de Chimalhuacán, Dagoberto Álvarez Hernández, quien cuenta en su haber con varios casos que dilata al parecer para favorecer a presuntos inculpados de delitos.\r\nLa quejosa, desde la violación registrada el pasado 28 de junio del 2011 en el Barrio de Vidrieros, se encuentra en tratamiento antidepresivo y pese a existir la denuncia por el delito de violación, bajo la carpeta de investigación 332580970224511, no hay respuesta alguna a su caso.\r\nLa joven por razones obvias omitió su nombre, pero señaló que como toda jovencita, a sus 16 años, tenía aspiraciones y anhelos, como estudiar y divertirse, tener un novio o salir a pasear; pero también tenía prioridades, la principal: ayudar a sus padres con los gastos de su hogar.\r\nPor ello, buscó un empleo modesto. Por las tardes ayudaba a Luis Francisco Duarte Rivera, un vendedor de elotes del barrio Vidrieros de este municipio; ella vendía y realizaba algunas actividades domésticas. Ese día luego de terminar la venta del día, el sujeto le pidió que lo acompañara a su casa para que lavara trastes.\r\nMientras ella realizaba esa tarea, su ex patrón recorría su cuerpo con la mirada una y otra vez, hasta que perdió el control y se abalanzó sobre ella, comenzó a besarla y abrazarla por la fuerza. Al resistirse, la chica logró que el sujeto se alejara momentáneamente, pero sólo para que volviera a arremeter con mayor decisión.\r\nPor la fuerza del sujeto la sometió y la condujo hasta su recámara donde la despojó violentamente de su ropa y se le echó encima, quizá el llanto o la mirada de pánico de la joven inhibieron al atacante, quien terminó por rendirse, liberando a su presa. La muchacha se vistió y salió del lugar.\r\nAl llegar a su casa le contó lo sucedido a su madre, quien de inmediato presentó una denuncia penal en el Centro de Justicia de Chimalhuacán, donde se inició el peregrinar.\r\nA casi 9 meses de que se pidió justicia para esta joven La Mesa número 1 de trámite a cargo de Dagoberto Álvarez no le ha dado puntual seguimiento, incluso ha encontrado obstáculos, primero porque el representante social ha intentado una y otra vez persuadirla de que acepte «llegar a un acuerdo económico con el abogado de su agresor», primero de forma sutil, luego de la manera más soez.\r\nPor si fueran poco, las palabras, proferidas por su violador la siguen insultando e incluso de otros amigos del individuo que se burlan, han llegado a advertir a la agraviada que si no desiste en su demanda, podría determinar que se trató de actos libidinosos, con lo cual el agresor tendría su libertad bajo fianza, simplemente por el hecho de que no hubo penetración.