Agencia MVT/José Contreras Contreras
TOLUCA, México, 10 de Mayo.- La vida para quienes habitan en las calles Ignacio de la Llave y 18 de Marzo, en el sector popular La Retama, de Toluca, cambió drásticamente por la decisión de la autoridad municipal de bloquear el paso al tránsito en la avenida lerdo de Tejada, y desviar todo el tráfico precisamente por donde antes llevaban otro ritmo.
Algunos establecimientos comerciales están en riesgo de quebrar porque hoy el tráfico vehicular ha hecho prácticamente imposible cruzar la acera para ir a la papelería, para acudir a la miscelánea e incluso para degustar una torta o una “flauta” en la tradicional taquería de El Sol, ahora ubicada en la esquina de Ignacio de la Llave y avenida Texcoco.
“Yo tengo una papelería, antes todo el mundo venía a comprar aquí, sobre todo los niños, salían de la escuela y pasaban por sus cosas para hacer la tarea, pero ahora no pueden porque los autobuses no los dejan atravesar, se ha vuelto muy peligroso intentar cruzar la calle, pasar de una acera a otra”, refirió la señora Alicia, una de muchas vecinas afectadas.
Y es que el tránsito de unidades motoras se multiplicó hasta en diez veces, sobre todo de unidades de transporte público, las cuales para continuar su ruta habitual que era por la avenida Lerdo de Tejada, ahora tienen que doblar a la derecha sobre la calle Ignacio de la Llave, subir hasta 18 de marzo, dar vuelta a la izquierda, y llegar hasta la calle Jilotepec para retornar a su camino inicial.
Todo esto se deriva del bloqueo de la avenida Lerdo de Tejada que instruyó la autoridad municipal para dar paso a las obras de rehabilitación de la bóveda del río Verdiguel, así como a la construcción de la plaza El Molino, que se lleva a cabo en el cruce de Lerdo y Quintana Roo, en la zona centro de la capital mexiquense.
Ante la nula señalización de la autoridad, los vecinos elaboraron improvisadas pancartas para advertir a los conductores, sobre todo a los de autobuses de pasajeros, que deben tener cuidado con los peatones.
“Es que a los choferes no les importan los peatones, a ellos solamente les importa pasar rápido, no les importa si para eso le echan el camión a quien sea, son unos altaneros, si uno les pide el paso, además de echar el camión, nos dicen de groserías”, acusó Silvia Estrada Vega, otra de las afectadas.
Los vecinos comentaron que aunque envían todos los días a un elemento de Tránsito municipal a regular el tráfico, “es insuficiente, además de que los policías de Tránsito solamente piensan también en los vehículos, no en las personas, se la pasan dando el paso a los camiones y coches, pero a la gente ni siquiera le hacen caso”, concluyeron.
