TOLUCA, México, 5 de Feb.- Ambientalistas mexiquenses iniciaron un proyecto para aprovechar los deshechos orgánicos del Rastro Municipal de Toluca para transformarlos en abono biológico y con ello, dar solución a un problema de contaminación y economizar los costos para los agricultores. \r\nEl asesor técnico de la asociación civil Juntos por la Dignificación y Justicia Social, José Luis Valdés Martínez, indicó que este método es realizado por primera vez en el municipio de Toluca. Inició en septiembre del 2012 y se prevé que la primera producción salga el próximo marzo para el comienzo del ciclo agrícola.\r\nExplicó que el estiércol y el rumen, que es el alimento que le sacan al animal antes de sacrificarlo, se pone a la intemperie varias semanas, después se combina con minerales para acelerar el proceso de descomposición, luego se pasa por unos harneros para limpiar la composta y se le añade carbonato de calcio y magnesio para fortalecerlo. \r\nEl especialista indicó que de un metro cúbico de estiércol se pueden producir 600 kilogramos de abono orgánico, y se prevé que al año se puedan producir más de mil 260 metros cúbicos de bio-fertilizante. \r\nExplicó que con este método es posible reducir los costos de fertilización en más de 50 por ciento, pues de otros tipo de fertilizantes se emplean cuatro toneladas por hectárea y de éste se requieren 600 kilogramos por hectárea. \r\nPor su parte, el representante nacional de Juntos por la Dignificación y Justicia Social, Gustavo Rafael Loredo Cardoso, informó que también han logrado innovar y obtener un fertilizante líquido que proviene de los lixiviados de la materia orgánica que después mezclan con bacterias, hongos y minerales para su fermentación biológica. \r\nAñadió que diez por ciento de la materia orgánica que captan, se mezcla con lombrices rojas californianas que son las encargadas de degradar la materia y realizar la composta, un abono empleado para germinar y para cultivos de hortalizas. \r\nEl proyecto, concluyó, busca contribuir con el medio ambiente y la economía de los campesinos, además de que nutre y mejora la calidad de la tierra para hacerla más productiva para la agricultura.