METEPEC, México, 20 de Feb.- Existen al menos 200 sociedades de ahorro y crédito popular que operan al margen de la ley y captan recursos indebidamente, principalmente en los estados de Guerrero, Oaxaca, Puebla y Veracruz, pero también lo hacen en el Estado de México, advirtió el delegado de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), Gerardo Núñez Ríos.\r\nIndicó que el sector de ahorro y crédito popular ha sido un sector incipiente en transparencia y educación financiera. Por ello, «es necesario tener mayor difusión cultural en estos temas y acercar a la población, sobre todo a aquella más vulnerable, a fin de que conozca los beneficios y riesgos de participar en estas sociedades, particularmente tratándose del ahorro», indicó.\r\nApuntó que, a la fecha, son 98 entidades que ya tienen autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV); de ellas, 59 son cooperativas y 40 sociedades financieras populares, y hay 231 que están en proceso de obtener autorización para cumplir con los estándares que señala el marco legal.\r\nAlertó que algunas de las sociedades que operan al margen de la ley pueden llegar a ofrecer tasas de interés de más del 10 por ciento anual, lo cual está fuera de mercado, situación que en muchas ocasiones deriva en fraude y quiebra de estas mismas entidades.\r\nPor ello, Núñez Ríos recomendó únicamente invertir en instituciones autorizadas, y, en su caso, en aquellas que están en proceso de obtener su autorización.\r\n»La mayor parte de los problemas de captación indebida, insolvencia y fraudes, se han cometido en instituciones que no tienen autorización y no están en proceso de regularización», acotó.\r\nExplicó que la autorización de la CNBV reduce el nivel de riesgo, pues están sujetos a la supervisión y evaluación de la autoridad, además de que cuentan con un fondo de protección.\r\n»Los usuarios de Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo tienen derecho y la responsabilidad de participar en la toma de decisiones, cambios de directivos, acudir a las asambleas, solicitar los estados financieros y, en general, velar por la buena marcha de la institución», concluyó.