TOLUCA, México, 14 de Marzo.- Organizaciones educativas y sociales que operan en la zona oriente de la entidad, exigieron su derecho a audiencia con el gobernador Enrique Peña Nieto, y anunciaron una movilización el próximo 5 de abril para exigir a la administración estatal que cumpla los compromisos que mantiene pendientes con ese sector.\r\nEn conferencia, representantes de organizaciones como Universidad del Pueblo de Nezahualcóyotl, Frente de Escuelas Democráticas, Plenum XXI, y la Coordinadora de Escuelas Democráticas del Estado de México (CEDEM), entre otras, denunciaron que son objeto de represión por parte de las autoridades educativas mexiquenses.\r\nMartha Martínez Calvo, a nombre de la Coordinadora de Escuelas Democráticas del Estado de México, aseguró que la secretaría de Educación de la entidad «les ha arrebatado el reconocimiento de decenas de instituciones a las que ya se había entregado la clave de trabajo y se suspendió el pago a todos los maestros que ahí laboran».\r\nDio a conocer que estas organizaciones ofrecen educación básica y media superior en comunidades de municipios como Chicoloapan, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl, Ecatepec y Tultitlán, entre otros, «ahí donde el gobierno no ha querido llevar las escuelas y donde otros maestros no se atreven a ir a trabajar».\r\nElías Vargas Ramírez, de la Universidad del Pueblo de Nezahualcóyotl, se quejó de que los ayuntamientos de la zona oriente, ahora encabezados por alcaldes priistas, han cortado el suministro de agua y energía eléctrica a esos planteles, como una forma de presión para que dejen de operar.\r\nExplicó que esas instituciones recibieron el reconocimiento oficial desde hace más de seis años, en la pasada administración estatal, pero ahora la autoridad educativa lleva a cabo una campaña de «extinción» de esas escuelas, a las que no desea dejar operar.\r\n»Hay muchos maestros que ya van a cumplir seis años de que se les suspendió su pago, y cientos de alumnos a los que no se les han querido reconocer sus estudios, simplemente porque a las autoridades educativas ya no le gustó que operen nuestras escuelas», concluyó Vargas Ramírez. \r\n