TOLUCA, México, 10 de Jun.- Aldo Luis de la Cruz nació con una malformación en el corazón, pero los doctores del Centro de Salud de Antavi, poblado del municipio mexiquense de Temoaya, de donde es originario este pequeño de cuatro años, nunca supieron que tenía un soplo en el órgano más importante del cuerpo humano: el corazón. \rAntes de la operación a corazón abierto que se realizó al pequeño Aldo, aguardó tres años para ese momento, pues los escasos recursos de sus padres y la falta de equipo que en ese entonces padecía el Hospital del Niño, lo mantuvieron en lista de espera. \rAl mes de cumplir los cuatro años, este pequeño llegó al único nosocomio pediátrico existente en el estado de México, para recibir el mejor regalo, una intervención cardiaca que le garantizará una vida sana y la oportunidad de hacer actividades que no podía desempeñar con un corazón enfermo.\rEn punto de las ocho y media de la mañana, Aldo dejó el área de hospitalización para que un equipo numeroso de médicos especialistas lo prepararan para ingresarlo al quirófano, lo que ocurrió hasta las 10:00 horas.\rSu papá, Pedro Luis Andrés, quien ha estado siempre a su lado, lo abrazó, se despidió de él y sin mencionarle al niño a dónde lo llevarían y qué es lo que pasaría, le dio la bendición con la firme esperanza de verlo en unas cuantas horas. \rEl cirujano cardiovascular, Humberto Rodríguez Saldaña, empezó con la operación a corazón abierto, que en un hospital privado costaría más de 350 mil pesos. \rAcompañado por un grupo de 13 personas, entre ellos enfermeras, anestesiólogos y médicos residentes, en un ambiente de armonía bajo la música Trans, del DJ Arman Van Buren, abrieron la caja torácica de Aldo para quitarle el soplo de su corazón que reducía las posibilidades de que el niño llevará una vida normal.\rLa tecnología de la bomba de circulación extracorpórea permite parar el corazón, y permite que la circulación y oxigenación de la sangre fuera del cuerpo. \rFueron alrededor de 20 minutos los que se mantuvo detenido el corazón de Aldo, mientras le pusieron un parche en el soplo que presentaba.\rEl pequeño se encuentra en la etapa de recuperación que se pronostica durará un mes, con un seguimiento de seis a doce meses.\r